martes, 28 de abril de 2015

LA HORA DEL CUENTO: LECTURA "TODOS SOIS MIS FAVORITOS "




JUSTIFICACIÓN DEL TEMA Y LA EDAD DEL RECEPTOR

A la hora de elegir la estrategia he escogido la lectura, pues a decir verdad, no lo tenía preparado y mi compañera María Martínez había elegido narración, y Elisa Scapin la de cuentacuentos, por tanto era la estrategia que quedaba pendiente.

El libro que he escogido se titula “Todos sois mis favoritos”, cuyo tema principal se basa en el vínculo afectivo entre padres e hijos, del cual subyacen otros igual de importantes, como la aparición de los celos infantiles, la formación de la identidad personal que nos hace únicos, así como la necesidad de los niños de sentirse queridos constantemente.

En este sentido, una de las primeras experiencias que puede llevar a un humano a sentir celos es la llegada de un hermano.
Teniendo en cuenta el momento evolutivo del niño, los celos son comunes cuando el nacimiento del hermano se produce entre los 2 años hasta los 5 o 6 aproximadamente. Cuando la llegada del hermano se produce durante la fase de apego del niño a la madre, es probable que éste reaccione con un comportamiento celoso demandando más atención. Por esta razón la edad a la que he orientado mi lectura es de 2-3 años, pues al estar la fase de apego aún latente, hay mayor probabilidad de que surjan los celos infantiles, y creo que es un libro idóneo para abordar esa cuestión.

Si bien es cierto, que en la aparición de éstos también pueden influir otras causas, como son las características personales del niño, los estilos educativos de los padres así como el clima familiar, y los factores ambientales

Dependiendo de la personalidad del niño, su edad y sus circunstancias ambientales, las manifestaciones de sus celos variarán. En general, algunas de estas manifestaciones pueden ser dificultad para obedecer, negativismo, agresividad, cambios de humor, signos de infelicidad, regresiones de conductas e hitos ya superados, alteraciones del sueño y hábitos alimenticios, negar errores propios y culpabilizar a los demás…

Respecto a este tema, este libro me parece idóneo, pues a lo largo del cuento, el niño puede identificarse fácilmente con cualquiera de los tres ositos. Cada oso se compara con sus hermanos y se pregunta por qué le quieren sus padres si él no es el mayor, si no tiene manchas como los demás, etc. (“¿Cuál es vuestro osito favorito? “). Aquí es donde entra en juego el tema de la identidad personal y la diferencia. Cada osito es diferente, uno es el más pequeño, otro no tiene manchas… lo que provoca que los tres se sientan inseguros frente a sus hermanos.

 Los adultos resuelven las dudas de los ositos cuando explican a cada uno de ellos qué cualidades lo hacen único y especial (“eres el osito más maravilloso que nadie ha visto jamás”). Entonces, ningún osito tiene la necesidad de compararse con sus hermanos y los celos desaparecen.

Este libro trabaja los celos con un enfoque positivo, centrando la atención en la singularidad de cada niño (identidad personal) consiguiendo que no sientan la necesidad de compararse con los demás para valorarse, ya que les da herramientas para que encuentren en sí mismos las cualidades que los hacen únicos y especiales, transmitiéndoles el mensaje de aceptación y de estima del adulto al niño (sentirse queridos constantemente).





COMO LO HICE DELANTE DE MIS COMPAÑERAS Y MI AUTOEVALUCACIÓN

Realicé la actividad junto a dos compañeras más, Elisa Scapin que optó por la estrategia del cuentacuentos, y con María Martínez que hizo la narración.

Primeramente ojeé un poco el libro, pues no lo tenía preparado, y capté la idea global. 

Intenté dar una entonación lo más natural posible, que no resultara aburrida, ni que fuera sobreactuada, aunque la verdad, creo que en alguna ocasión hablé demasiado en interrogativo.

Según iba leyendo la historia, opté por no enseñar las ilustraciones a mis compañeras, y preferí dejarlo para cuando hubiera terminado. Creo que de esa manera el receptor va imaginando la historia haciendo uso de su propia creatividad de manera simultánea a la lectura.

En alguna ocasión me percaté de que iba demasiado deprisa, pero al ser la última en realizar la actividad estaba preocupada por si no me daba tiempo. Si realizara de nuevo la actividad intentaría realizar más pausas, y controlar la respiración.

Al finalizar la lectura mis compañeras me propusieron preguntas que podría hacer a los niños, tales como, ¿en casa hay algún osito favorito?
También me sugirieron que antes de comenzar con la lectura, debería haber hecho una pequeña introducción, tipo “os voy a contar la historia de los tres hermanos ositos...”, aunque de nuevo, creo que no la hice por culpa de las prisas.

Tengo que reconocer, que como no me había preparado con antelación la actividad, y por tanto no dominaba el texto, me resultó difícil poder dirigir de vez en cuando la mirada a mis compañeras. Esto creo que es fundamental, porque es una manera de conectar con el interlocutor, de hacerle partícipe del cuento; es fundamental  intercalar miradas para captar la atención del receptor.

 De hecho, creo que la mayoría de nosotras habíamos subestimado la importancia de trabajar previamente un cuento antes de hacerlo con los niños, y dábamos por hecho que leer un cuento era “coser y cantar”.  Esta actividad me ha servido para darme cuenta de que no se trata simplemente de leerles “cualquier cosa”, sino de hacerlo ofreciéndoles la calidad literaria (tanto en contenido como en la forma) que cualquier persona merece, y que desgraciadamente, por ser niños en muchas ocasiones obviamos, impidiéndoles el simple disfrute de una obra, sin más.           
 

COMO LO HARÍA DELANTE DE LOS NIÑOS

Primeramente seleccionaría un cuento adecuado para la edad, en este caso “todos sois mis favoritos” que lo utilizaría con niños de 2-3 años, pues aún están en la fase de apego, en la cual el niño es más susceptible de desarrollar celos infantiles, y lo leería previamente.

En esta lectura previa (y obviamente en la posterior), trabajaría la entonación, el ritmo, el volumen, la expresividad, el gesto, los movimientos corporales, las pausas, la vocalización adecuada,  pues es a través de esto como el niño lee la significación de la narración.

Además intentaría leer con normalidad, como si leyese a un adulto, sin exagerar las entonaciones ni abusar del tono interrogativo, pero sin resultar aburrida claro. Al fin y al cabo, se trata de ser naturales,  y no de realizar una sobreactuación.

Me aseguraría de crear un clima adecuado y de establecer comunicación con los pequeños. Para que ésta exista, es imprescindible crear una dinámica de interacción con ellos, pues es a través de ésta como les introducimos en la historia, mantenemos su atención, y comprobamos sus niveles de comprensión.

Una manera de interactuar sería dirigirme a los niños a medida que fuese leyendo y les lanzaría preguntas sobre el tema que estamos desarrollando (relación entre padres e hijos, identidad, celos), las acciones que realizan los protagonistas (¿qué hace el osito primero? ¿Qué le pasa al osito segundo?), el probable desenlace (¿qué le dirá mamá oso? ¿Será su osito favorito?) y el desenlace deseado (¿querrán a todos los ositos por igual?)

Otra forma que utilizaría para interactuar con los niños sería realizar preguntas finales en base a una comprensión global de la historia y sus elementos esenciales, sin pretender que memoricen detalles irrelevantes.

Y para terminar, intentaría no convertir la lectura del cuento en una ocasión para enseñarles, pues como hemos estudiado en el bloque, la literatura infantil debe ser disfrutada en sí misma.

BIBLIOGRAFÍA

Apuntes bloque 3





jueves, 16 de abril de 2015

EL HOMBRE DE LA PIEL DE OSO


ADAPTACIÓN CUENTO "EL HOMBRE DE LA PIEL DE OSO"


  
En el país donde nacen los sueños, existía un niño que se sentía terriblemente triste y solo…Su nombre era Samwell, pero en la aldea todos le llamaban Sam…

Sam vivía con su tío Tod, pues sólo le tenía a él, y digamos que era un viejo avaro y gruñón, que siempre le obligaba a  hacer duros trabajos…Vamos, que le hacía la vida imposible…Tan imposible, que un día después de dar de comer a las gallinas, Sam decidió que debía emprender su camino y conocer todo aquello que había leído en sus libros…Al fin y al cabo era el país de los sueños ¿no?

Y así lo hizo…Sam se despidió de su tío, y partió hacía…bueno, en realidad no sabía muy bien hacia donde…Así que anduvo,  anduvo y anduvo durante horas, muchas horas...hasta que tal era su cansancio, que no tuvo más remedio que parar a descansar. Y mira por donde, allí había un gran árbol donde poder echarse una buena siesta...

Pasado un rato, algo lo despertó…

-¡¡¡¡¡¡¡GRRRRRRRRRRRRRR!!!!!!!!!

Sam se levantó de un salto, no podía creer lo que tenía ante sus ojos ¡Un feroz león que le miraba fijamente!! Sam se pellizco por si acaso era un sueño, pero no, era un león ¡vivito y coleando!
De repente, Sam se dio cuenta que no era un León normal, como los que había visto en sus libros... (Pues a decir verdad, en el país donde nacen los sueños no había leones...).En realidad era una criatura medio león, medio caballo. ¡Era enorme!

-Mi nombre es Eddard...¡¡GRRRRRRRR!!...Conozco tu tristeza, y sé que sueñas con riquezas ¡¡GRRRRRRR!! Si a este oso puedes vencer ¡todas ellas yo te daré! 

Y en ese momento apareció un oso gigantesco de la nada… Tan pronto como pudo, Sam alzó su fusil y derribó a tan terrible bestia de un disparo. A continuación la extraña criatura comenzó a hablar...

-Como valiente has sido, y me doy por servido,  riquezas te daré pero un pacto has de querer, ¡¡GGRRRRRRRR!!!!!

Sam, se sintió picado por la curiosidad… ¿riquezas? ¿Un pacto?

Así que ni corto ni perezoso preguntó a Eddard cual era aquel pacto, y éste respondió:

 -Un rey como yo parecerás, con esta piel de oso que te cubrirá, más nunca lavarte podrás, en los 7 años que durará.

-¿Eso es todo? Respondió Sam

-Hay algo más...En ningún sitio más de seis días permanecerás, así que de un lado a otro siempre vas a estar. A cambio, todas las monedas podrás tener, cuando mi nombre digas del revés.   

Sam pensó que aquello no era tan difícil…total, ni siquiera sabía ni a donde iba. ..Así que no pasar más de seis días en el mismo sitio no era algo que le preocupara demasiado...Así que aceptó el trato.
Sam tomó aquella piel de oso, y susurró en voz baja…Dradde...y ¡zas! Un puñado de monedas apareció en su mano.

Sam continuó su camino, cubierto por la piel de oso, y  mientras caminaba, pensaba que haría con tantas monedas y riquezas.
Pensó que compraría una casa como aquella en la que una vez vivió feliz junto a sus amorosos padres, compraría gallinas y cerdos como los que había en casa del tío Tod, compraría libros, muchos libros, y sobre todo, ayudaría a todos aquellos que lo necesitaran, pues ante todo, Sam era un niño muy bondadoso y de enorme corazón.

Al principio, todo era fantástico. Fue de aquí para allá, recorriendo sitios increíbles, sitios mágicos con los que siempre había soñado...Y además, como ayudaba a todo el que lo necesitaba, era muy querido allá donde iba. Esto colmaba de felicidad a Sam, pues tiempo atrás se había sentido muy solo... Ahora todo el mundo le quería...

Y así paso el primer año. Y el segundo…Y Sam nunca se cansaba de repetir Dradde…Dradde...Dradde…

Pero según pasaban los años, las cosas cada vez se hacían más difíciles…Sam estaba sucio, sucísimo, cada vez olía peor, y parecía de todo menos…menos Sam.

Era ya el cuarto año y Sam ya no se sentía tan feliz como al principio…Parecía un auténtico oso, pues su pelo, largo y desgreñado, se confundía  con la propia  piel de oso...
Sam estaba triste, todo el mundo le evitaba…Cada vez pasaba más tiempo solo, e incluso le era muy difícil ayudar a los demás.

Pero una fría noche de aquel cuarto año, harto de buscar en vano un sitio donde dormir, pues ningún posadero estaba dispuesto a dar alojamiento a un tipo con tal aspecto, decidió cobijarse en un pequeño establo que encontró en su camino.

Casi estaba a punto de quedarse dormido, cuando de repente escuchó un llanto cercano….Para su sorpresa, no estaba solo en aquel lugar. Allí, en medio de aquella oscuridad, había un anciano que estaba triste y desesperado...Este le contó que había perdido toda su fortuna y que temía por el futuro incierto de sus queridas hijas...

Sam, guiado por su bondad y buen corazón, ofreció tantas monedas como pudo al anciano…y éste, tan agradecido estaba, que a pesar de apenas ver el aspecto de Sam, le invitó a que lo acompañara a su casa, ofreciéndole la mano de cualquiera de sus dos hijas.

A la mañana siguiente, cuando llegaron a casa del anciano, las hijas se quedaron perplejas…La mayor salió huyendo despavorida, horrorizada con la idea de casarse con aquel hombre. En cambio Lena, la pequeña, que al igual que Sam, gozaba de una bondad inmensa, se ofreció a casarse con él.
Durante los seis días que Sam estuvo allí, ambos compartieron paseos, juegos, risas...y así, sin darse cuenta, se fueron enamorando…

Pero llegó el sexto día, y Sam debía marchar...Así que entrego la mitad de un anillo a Lena, y le dijo:

-Te entrego la mitad de este anillo en señal de mi amor. Dentro de tres años regresaré,  y si aún lo conservas será que me amas y serás mi esposa. Si para entonces te has deshecho de él, serás libre de casarte con quien desees. Y diciendo esto partió, dejando a Lena muy apenada...

Y así pasó el quinto año, el sexto, y por fin….el tan ansiado séptimo año.
Sam acudió al mismo sitio, a aquel árbol donde siete años atrás había firmado aquel pacto. Se sentó a esperar, y justo a la misma hora, en el mismo lugar, apareció  Eddard:

-¡¡¡Rayos y centellas!!!!! ¡¡¡GGRRRRRRR!!!! Has cumplido tu promesa, por lo tanto no tengo más remedio que devolverte tu aspecto…dijo entre dientes...

Y de repente tras una explosión de chispas, Sam recobró su aspecto...
- Gauauuuuuu ¡vuelvo a ser yo! Dijo emocionado.

Sam se agachó para dejar la piel de oso en el suelo, y cuando quiso levantar la mirada Eddard había desaparecido misteriosamente…
Inmediatamente después, sin perder tiempo, Sam comenzó a caminar en busca de su amada…caminó noche y día, pues se moría de amor por verla…

Una vez llegó allí, como era lógico, nadie le reconoció. Así que Sam decidió pasar desapercibido y llevarles la corriente...Le resultaba divertido. La hermana mayor quedó prendada de él enseguida, pero Lena, fiel a su amado, no mostró interés alguno.

Cuando llegó la hora de la cena, Sam colocó la mitad del anillo en la copa de Lena, y ésta, al verlo supo inmediatamente que Sam había regresado. La hermana, que en su día no supo ver más allá de la piel de oso,  se quedó muertita de la envidia...Así que  incapaz de soportarlo, decidió irse de vacaciones a la playa en el País de las maravillas, que no pillaba muy lejos, a visitar a su amiga Alicia.

Días después celebraron su boda con la mayor fiesta que jamás se había celebrado en todo el reino, y juntos vivieron felices para siempre…
Y aquí se acaba este cuento, como me lo contaron te lo cuento...


ANÁLISIS

A la hora de plantear mi adaptación del cuento “La piel de oso”, he tenido en cuenta la edad de los receptores, que sería de 5 a 6 años. Esto implica ser conscientes de la etapa de desarrollo cognoscitivo en la que se encuentran, y que, tal como hemos estudiado en el módulo docente, es la etapa del pensamiento intuitivo, caracteriza por:
-          Experimentar terrores personales normales.
-          Desarrolla el concepto de identidad individual y su autoestima.
-          Tiene una vida imaginativa rica y abundante, que le ayuda a entender lo real.
-          Ha desarrollado el concepto básico de la narración.
-          Desarrolla su capacidad de percepción selectiva y observación.
     Tiene un concepto de moralidad absoluto.

Además he tenido muy presente la función lúdica-pedagógica del cuento folclórico, sin dar enseñanzas explícitas ni moralizantes, pues el objetivo es que los pequeños disfruten del cuento, no de convertir el relato en un texto paraliterario. Se trata de que el niño decida libremente que es lo que el cuento le transmite, y no lo que nos transmite a nosotros vaya.

Tampoco he pretendido que el niño se identifique con el protagonista, pues hay que tener en cuenta que estos suelen ser mayores que ellos, y los ven como un ideal al que quieren parecerse cuando sean mayores.  

 ELEMENTOS CAMBIADOS

 He cambiado el comienzo del cuento y la situación del protagonista. Sam no vive con sus hermanos que le echan de casa porque son muy pobres (y por eso se va a la guerra). Yo he preferido decir que vive con su tío Tod, que es avaro, gruñón e insoportable, obligándole a hacer duros trabajos, y que por eso decide irse y conocer el mundo (Se corresponde con la figura de huérfano maltratado que  señala Propp. A partir de aquí se inicia el viaje iniciático). Sinceramente he cambiado esto porque creo que tiene más sentido. ¿Qué hermano mandaría a un niño a la guerra? Y aún más difícil es comprender esto para un niño de 5 años, que suele tener en un pedestal a sus hermanos mayores. Si bien es cierto que tampoco creo que sea algo esencial para la adaptación, pues tal y como hemos estudiado en el bloque docente, los niños se fijan en los detalles que le llaman la atención y no globaliza, y no hay que hay que obsesionarse con la absoluta comprensión del cuento.

También he cambiado la figura del diablo por la criatura mágica Eddard (medio León, medio Caballo) porque aquel tiene connotaciones religiosas que creo que no son necesarias. Otra de las razones por las que he cambiado esto es porque Eddard me permite introducir la figura del animal mágico (Propp), y más concretamente un león por sus rugidos, que deberemos interpretar al contar el cuento, convirtiéndose en un recurso para simular ruidos.

 Otro de los cambios que he realizado ha sido la forma en que Sam obtiene su riqueza. Partíamos de un suntuoso traje, de cuyo bolsillo salían monedas, y yo he preferido usar el recurso del conjuro: Sam debe repetir el nombre de Eddard al revés (Dradde), pues está dentro de las motivaciones de la etapa animista (Francisco Cubells). En esta línea, he introducido rimas para aportarle musicalidad y ritmo al cuento.

Respecto al final no lo he querido cambiar demasiado, por lo que no he suprimido la desaparición de la hermana. Creo que tal y como explican las teorías de Bettelheim no hay que alejar al receptor de las crudezas de la realidad. Y en este cuento, el final no solo se resume al final feliz de los enamorados, si no que el suicidio de la hermana (su desaparición) también es algo importante con su significado. No creo que una buena adaptación se limite a decir que el príncipe regresa y fueron felices para siempre. ¿Y la hermana? Es algo importante el hecho de que ahora está atormentada, porque no supo ver más allá de sus narices, y tiene tal tormento que la desesperación la lleva a este trágico final. Yo he intentado adaptarlo dándole un toque de humor, diciendo que no puede soportarlo y se va de vacaciones huyendo, pero el hecho en sí, que es transmitir la frustración de ésta, es el mismo y yo he pretendido respetarlo.

ELEMENTOS QUE HE MANTENIDO

En cuanto a estos, en primer lugar he mantenido la la figura del héroe con un destino fijo hacia el cual camina. Comienza desde un hecho extraordinario desde el que se desarrolla la narración y es ayudado por un ser sobrenatural con poder mágico.

También he mantenido los motivos principales:
-tesoro oculto (las monedas).
-viaje y búsqueda (viaje iniciático, que le lleva a obtención de riquezas).
-fuga (huida de peligros, en este caso la explotación de su tío Tod).
-búsqueda del amor (el amor verdadero entre Sam y Lena).

Por otro lado,  he mantenido la estructura tipo: fechoría inicial (planteamiento), acción del héroe (nudo), desenlace feliz (triunfo del amor: reencuentro entre Sam y Lena)

Así mismo también he mantenido la cronología del cuento, siendo lineal, con relación de causa-efecto. En este sentido, he mantenido las fórmulas de entrada y salida al cuento para situar la narración, pero he usado otras variantes: “En el país donde nacen los sueños…” “Y aquí se acaba este cuento, y como me lo contaron te lo cuento...”

Por supuesto he mantenido la prueba inicial, derribar al oso, y la prueba posterior, el pacto de estar 7 años sin lavarse, cuya superación representan la vida adulta.


También he respetado el matrimonio como final feliz, que simboliza  haber superado las pruebas, haber alcanzado la vida adulta, encontrar un compañero y crear un nuevo núcleo familiar.

Por último decir que  he querido seguir transmitiendo la bondad que desprende el niño protagonista,  y en definitiva, la magia y emoción del cuento folclórico que nos describe el paso de la infancia a la edad adulta, estimulando la fantasía y la imaginación del niño. 

BLIBLIOGRAFÍA
Bloquedocente literatura infantil.
Propp V. (1928).Morfología del cuento. Editorial Fundamentos.
Bettelheim B. (1994). Psicoanálisis de los cuentos de hadas. Barcelona.

viernes, 10 de abril de 2015

La cebra Camila



El libro que he escogido para esta actividad es “La cebra Camila”.
He seleccionado este libro, en primer lugar porque se trata de un texto literario, que es lo que quiero trabajar con los niños, pues cumple con las características que definen este tipo de textos: 
-tiene un objetivo artístico.
-tiene una función predominantemente poética, con un lenguaje simbólico.
-pertenece al género literario narrativo-poético
-es un texto de ficción.
Aparte de esto, otra de las cualidades que me han interesado a la hora de seleccionarlo, ha sido la aparición de animales personificados, en los que el niño puede identificarse,  con la cebra Camila, o identificar a otros, como a mamá cebra, con su propia mamá, o demás animales con los demás niños que le rodean.
Me leí varios de libros propuestos, pero La cebra Camila me encantó por su lenguaje poético, plagado de rimas.
Además, las ilustraciones me parecieron preciosas, sencillas, pero cargadas de expresividad y sensibilidad.   
La autora del libro es Marisa Núñez (Sarria, 1961), una escritora que ha trabajado como  maestra infantil. Como curiosidad señalar que también  publica con varios seudónimos como por ejemplo Patacrúa o Luisa Morandeira, y que suele escribir versiones de cuentos tradicionales publicados en formato de libro álbum aunque también tiene textos propios, como es este libro.
Su ilustrador es Óscar Villán, (Ourense, 1972), licenciado en Bellas Artes,  con cuyo primer trabajo de ilustración para el público infantil, titulado “El pequeño conejo blanco” recibió el Premio Nacional de Ilustración 1999.
Este libro lo usaría con niños de 4-5 años, pues se adapta perfectamente a la realidad evolutiva en la que se encuentran a esa edad: etapa preoperacional (Piaget); en la que a través del libro hacen uso del lenguaje simbólico, identifican roles conocidos, reconocen sus necesidades de explorar, su curiosidad, su autonomía, y sus emociones.

FICHA BIBLIOGRÁFICA

Título: La cebra Camila.
Autor: Marisa Núñez. (Sarria, 1961)
Ilustrador: Óscar Villán (Ourense, 1972)  
Editorial: Kalandra
Colección: Libros para soñar.
Fecha 1ª edición: noviembre de 2003
Edad en la que me baso para realizar este análisis: 4-5 años

ANÁLISIS DEL FORMATO

Análisis externo: Es un libro de 32 páginas, impreso a todo color, y encuadernado en cartoné,  en cuya portada aparece el personaje principal, la cebra Camila. Los colores de la portada, no son excesivamente estridentes, como si ocurre por ejemplo en “Elmer, el elefante”,  pero el hecho de aparecer la cebrita ataviada con sus pantalones y sus tirantes creo que tiene su punto divertido y atrayente para los niños.
Además el tamaño del libro, 22x22 cm, hace que sea manejable para los niños de 4-5 años, sintiéndose cómodos mientras lo sujetan con sus manitas.

 Ilustraciones: Como he comentado anteriormente, son sencillas, y con colores no demasiado chillones, pero a su vez están cargadas de expresividad y animación. Además, cada imagen refleja lo que vamos leyendo, por lo que como hemos estudiado, el código lingüístico y el gráfico interactúan proporcionando una real experiencia artística, que al fin y al cabo, es lo que pretendemos.
En general, si nos fijamos, destacan figuras y líneas alargadas y curvas, como son el propio personaje, alargado y redondo, la serpiente muy larga también, los arboles muy altos, o el arcoíris, tan largo que ocupa dos páginas, sin aparecer apenas elementos secundarios más allá de los propios personajes.
















Además, las escenas suelen ocupar dos páginas a la par, por lo que le da muchísima amplitud a la imagen global. He observado en otros libros, como por ejemplo, “esta vaca ha puesto un huevo”, que a veces divide cada página en cuatro imágenes, quedando un poco apelotonado en mi opinión. Otro aspecto que me parece importantísimo destacar, es que se trata de ilustraciones nada estereotipadas, no sujetas a ningún cliché, que permiten dar rienda suelta a la imaginación del niño (y por qué no, a la nuestra también), evocándole sensaciones con las que crear su propia visión del mundo.  Así Camila no es una cebra como cualquier otra, es Camila, con sus larguísimas “manos”, sus pequeños piececillos, y su silueta rechoncha. Una cigarra que usa sombrero, un pato que lleva zapatos, y una mamá cebra que usa mandil.

TipografíaComo bien sabemos, no nacemos viendo, sino con la capacidad de aprender a ver, y esta maduración visual va unida a la evolución neuronal y motriz. Por ello, la letra debe ajustarse a nuestros pequeños receptores. Teniendo en cuenta que éstos se sitúan entre los  4 y 5 años, creo que tanto el tamaño, como la tipografía elegida (no siendo escolar en exceso), son adecuados, y facilitan la legibilidad del texto. Además, siempre se presentan los renglones perfectamente alineados, a diferencia de otros textos, como por ejemplo “enamorados”, donde a veces retuercen los renglones, haciéndolos curvos, diagonales e incluso serpenteantes, que si bien puede ser más original, en mi opinión hace mucho más difícil su legibilidad.

Los espacios entre caracteres, palabras y líneas son bajo mi punto de vista correctos, equilibrados, aunque si pienso que hay páginas en las que hay demasiados renglones y el texto es demasiado largo (16 renglones), y puede resultar un tanto agobiante.
Algo que me ha parecido muy hábil, es el hecho de usar las mayúsculas únicamente cuando citan números, consiguiendo enfatizar estas palabras en concreto, consiguiendo captar la atención del receptor.




ANÁLISIS DE CONTENIDO

Tema: El tema principal es el crecimiento, el paso de la infancia a una cierta conciencia del tiempo, al descubrimiento del mundo y los problemas que conlleva. Esa superación de la dependencia del adulto a la autonomía que nos permite descubrir el mundo a través de nuestra propia experiencia personal.
Hay que tener en cuenta que los receptores de mi cuento son niños de 4-5 años, los cuales se encuentren inmersos en el estadio preoperacional que señalaba Piaget, (que abarca de los 2 a los 7). En esta etapa se produce un adelanto extraordinario en la actividad representacional y aparece la función simbólica, los niños y niñas utilizan símbolos para representar objetos, lugares y personas, pueden retroceder y avanzar en el tiempo. El pensamiento va más allá de los actos y los hechos inmediatos. Así Camila va contando a cada personaje lo que le ha ocurrido en tiempo pasado, al principio lógicamente es un pasado cercano, pero según se van sucediendo los encuentros con los animales, llegamos al último donde el tiempo ya no es tan cercano.
El elemento simbólico en este cuento podemos encontrarlo en los tirantes y calzones (función simbólica), pues Camila ha crecido, y le entorpecen en su exploración, y experimentación del mundo.
El niño evoluciona en la conquista de su autonomía. Así Camila tiene esa cierta autonomía de la madre, que se queda en la casita. Este detalle es importante: Camila sale sola al exterior, y es ella junto a los animales que se encuentra quien resuelve el problema, y no su madre (autonomía). Y es precisamente en esa parte del cuento, en el encuentro con los otros animales donde podemos identificar esa expresión e integración social, ese saber comunicar, ese interés de los niños en  jugar con los demás que se produce en este estadio. (Proceso socialización).
Así podemos decir que los sentimientos, y su expresión, (Camila esta triste, y así lo expresa a sus amiguitos), también forma parte de la temática del texto.

El autoconcepto, su identidad, que dan forma a la autoestima también están presentes en el texto. Si nos fijamos, al final del cuento Camile le muestra orgullosa a su mama como ha conseguido de nuevo ser listada, y se estira todo lo que puede para enseñarle a su madre que ha crecida una cuarta. Dice literalmente “y se estiró mucho para lucirse aún más, y para que su madre la viese bien  (Camila está orgullosa de sí misma y quiere compartirlo)

En cuanto a los temas secundarios podemos encontrar varios. Lógicamente el de los animales, apareciendo distintos tipos que el pequeño lector puede identificar,  así como la solidaridad, el compañerismo, la ayuda de los demás, pues Camila se vale de sus amigos para resolver su problema. Dentro de esto, destacar las relaciones con sus iguales, sus amigos, y con la madre.
Otro de los temas secundarios que me ha encantado es el ingenio que usan entre todos para lograr que Camila vuelva a ser una cebrita listada. Una serpiente que le presta un anillo, un caracol que le dibuja una rayita de plata, un arcoíris que le da un remiendo azul, una araña que le teje una puntilla, una cigarra que le da una cuerda de su violín…cosas que en el maravilloso mundo imaginario de un niño son posibles.   
También otro de los temas secundarios son los primeros números, que como ya comenté en el apartado de la tipografía siempre aparecen en mayúsculas para enfatizarlos y captar la atención del lector, en este caso el niño. Además hay que darse cuenta que la  aparición de los números (que representan las lágrimas de Camila) siempre es correlativa hacia atrás, 7, 6, 5, 4, 3 lágrimas… Esto es muy útil, porque hace que el niño capte los números con un cierto orden, y una estructura lógica. Se trata de hecho  de una pequeña sucesión. Imaginemos, sería mucho más caótico que aparecieran entre mezclados 5, 3, 1, 6, 7, 4., 2...lagrimas por ejemplo, sin ningún orden. Además, son 7 lágrimas, y 7 amigos, y al final del cuento se muestra lo que cada uno de ellos le ha prestado : 



Por último, también aparecen los colores, representados a través de la aparición de la figura del arcoíris.

La estructura: La estructura es encadenada, sencilla y lineal: planteamiento, nudo y desenlace, que es la más adecuada para esta edad (4 años), pues como hemos estudiado, acciones como los flash back y otras rupturas de la linealidad no son recomendables para esta edad, si no a partir de los 8 o 9 años.
En el planteamiento se nos presenta a la protagonista (Camila) y cuál es su problema (el viento a borrado sus rayas y ahora parece una mula blanca); en el nudo narra lo que le va sucediendo a Camila (encuentro con los animales) y sus aventuras buscando la solución al problema; y en el desenlace nos cuenta como Camila muestra a su mama sus logros: ha conseguido de nuevo ser listada, y además todo lo que ha crecido ¡ya no necesita calzones ni tirantes!

La protagonista: El protagonista es un animal (la cebra Camila) personificado, y es adecuado porque el niño de 4-5 años puede identificarse fácilmente con él, que es de lo que se trata. ¿Y por qué? Porque Camila hace, siente y habla como un niño de esa edad.
 Bajo mi punto de vista, esto se consigue totalmente a través del texto, pues Camila explora su entorno, entendiendo todo lo que pasa a su alrededor partiendo de sí misma. Ella es el centro de todo lo que ocurre (egocentrismo); experimenta a través del encuentro con los animales y los objetos que éstos le van proporcionando, de la misma manera que el pequeño lector de 4-5 años explora, experimenta, manipula objetos y se relaciona con sus compañeros en su día día.  Y no solo eso. Camila al perder las rayas, siente miedo y pena y se echa a llorar, sentimientos que un niño de 4-5 años también experimenta en algunos momentos de su vida.
Como hemos hablado en clase, el personaje no debe estar orientado a expresar enseñanzas explícitas o didácticas, si no que el personaje debe adaptarse al niño, (en nuestro caso de 4-5 años), de tal forma que sea él mismo el que aprenda conceptos y actitudes. Esto también lo podemos apreciar en este texto, pues en ningún caso se habla de lo que está bien, o de lo que está mal, de quien es bueno, o quien es malo.. De hecho, Camila pierde sus rayas por el fuerte viento, a consecuencia de haber desobedecido a su mamá y no haberse puesto sus calzones y sus tirantes, pero en ningún caso se hace hincapié en esto, en absoluto, no se profundiza en el hecho de que Camila haya desobedecido a su madre, ni que se escapara dejándola preocupada.

.Los demás personajes: En cuanto a éstos, son adecuados porque representan roles conocidos para el niño. En la mamá cebra, el niño puede identificar a su propia madre.  El resto de personajes (la serpiente, el caracol, el arcoíris, la araña, la cigarra, el pato) con las personas más cercanas de su entorno con los que el niño se relaciona y juega y en los que encuentra ayuda y apoyo, como pueden ser su maestro, sus compañeros de clase, su abuelos..





Valores y contravalores: Uno de los valores que encontramos en el libro son la tenacidad, pues Camila no ceja en su empeño de volver a ser una cebra listada.
Camila tiene un carácter explorador, tiene curiosidades, que la llevan a salir sola al campo porque quiere descubrir cosas, y jugar con el viento. Esto creo que también son dos buenos valores.
Otro de los valores es la amistad, el compañerismo, pues es a través de los amiguitos que va encontrando, como consigue su meta.
Otro valor es el amor, que vemos a través de Camila y su madre. Camila vuelve a casa deseando abrazar a su mamá, y su madre muestra su amor y preocupación por ello cuando le dice “¿dónde te habías metido que no te encontraba?”, es decir, la estaba buscando, porque la quiere y siente su ausencia.
Como contravalor, si es cierto que aparece uno muy claro, y es que Camila es desobediente. No hace caso a su madre, y sale al campo sin sus calzones y sin sus tirantes, como su madre siempre le decía, y a consecuencia de eso el viento borra sus rayas de cebra. Pero como he aclarado anteriormente, en el texto no se especifica que Camila se haya portado mal por eso, ni que sea una cebra mala, ni siquiera que sea una cebra desobediente, o que le haya pasado tal cosa por no hacer caso a su madre…O dicho de otro modo, no se juzga la actitud de Camila. 

LenguajeEl texto está escrito en un estilo tierno y original. Me ha encantado el comienzo, que recuerda a los cuentos clásicos transportándonos a un país lejano: Camila vive "donde se acaba el mundo, en el país donde da la vuelta el viento...".
Utiliza constantemente juegos de preguntas y respuestas:




Otra rasgo muy característico son las reiteraciones, pues constantemente se repite ese juego de pregunta respuesta (en 7 ocasiones, en los 7 encuentros).
Como vemos en el ejemplo anterior, utiliza las rimas apoyados en un tono poético, destacando las rimas consonantes.



 Otros ejemplos son:

“Después se quedó pasmada mirando para un caracol,
             que asomaba los cuernos al sol”

“Camila siguió caminado,
  con un anillo en la pata
  y una rayita de plata”


Usa un vocabulario sencillo, de fácil comprensión para los niños de 4-5 años, pero en mi opinión hay poca adjetivación (ajustada, listada, pasmada y alguno más).
Los párrafos al principio del cuento son más pequeños, sobre los 4 o 5 renglones, pero a medida que avanza el cuento, van aumentando, siendo demasiado largos en alguna ocasión, bajo mi punto de vista, pues alguno llega a alcanzar los 16 renglones, y creo que para un niño de 4-5 años puede resultar cansado.


Conclusión: Tras este análisis, considero que yo si utilizaría este libro para niños de 4-5 años en mi aula de educación infantil. En primer lugar porque cumple con las características de un texto literario: objetivo artístico, función poética, ficción, lenguaje simbólico, género narrativo-poético.
Es un libro que físicamente resulta cómodo y de un tamaño adecuado, cuyas ilustraciones me han encantado, ya que no son nada estereotipadas, y reflejan claramente lo que explica el texto.
Considero que la letra, su estilo poco escolar, y su tamaño son adecuados para mis alumnos de 4-5 años.
Otra de las razones por las que usaría este libro es por la cantidad de temas que aborda cercanos a la realidad evolutiva de niños de 4-5 años. Desde el crecimiento, el descubrimiento del mundo y los problemas que ello supone, el uso de elementos simbólicos, la conquista de la autonomía, los sentimientos y su expresión…Hasta temas más secundarios como el ingenio, los números y los colores.
Su estructura es sencilla y adecuada para estos niños: planteamiento, nudo y desenlace, usando un lenguaje sencillo y comprensible para ellos, con función poética, haciendo uso de rimas, repeticiones...
 Una razón clave por la que lo elegiría es por su personaje principal, Camila, con la que el niño de 4-5 años puede identificarse muy fácilmente, ya que este hace, siente y habla como un niño, compartiendo sus mismos intereses e inquietudes. 
Además, el niño puede encontrar roles conocidos en el resto de personajes como su madre, sus compañeros de juegos, su maestro…
Encontramos grandes valores como la tenacidad, la curiosidad, la amistad, el amor…
Y por último, lo usaría porque no hay enseñanzas explicitas o didácticas, si no que consigue que el personaje se adapte al niño, de tal forma que sea él mismo el que aprenda conceptos y actitudes.


Apuntes Literatura Infantil Tema 1
Costance Kamii, Rheta Devries, (1995),  La teoría de Piaget y la educación preescolar, visor libros (2007).